Debo reconocer que tras cada noticia "futbolera" me viene el impulso de apretar el control remoto donde dice "channel" y poner algo mejor. Esta vez no tuve salida; todos los canales hablaban de lo mismo. Los pobres chicos de la rojita las vieron negras.
Iba preparando mi escasa tolerancia para soportar los comentarios defensivos, hasta que ví que los políticos se metieron al baile. Iván Moreira (UDI) incitaba a los chilenos a mostrar su malestar y repudio contra los actos de los policías canadienses. Luego aparece un padre diciendo que estos son actos xenofóbicos y para el broche de oro mi "amigui" Bachellet mete la cuchara para abrir las vías diplomáticas que solucionen o esclarezcan lo que sucedió.
"estábamos dando autógrafos para agradecer el cariño de la gente cuando los policías se nos acercaron y comenzaron a golpearnos..." declaró uno de los "lolos" jugadores.
Yo me pregunto: ¿en qué parte del mundo occidental te golpean por hacer nada? Perdonenme eternos defensores, pero si el amor es ciego, uds. sí que aman a los chicos de rojo.
Cuando creía que todos estaban cegados con la inocencia de los red boy's, al fin escucho la otra parte de la historia: "Los chicos estaban taimados por haber perdido y comenzaron a romper el bus y hacer escándalo" declaró Jorge Tarud (PPD)
¿Quién tiene la razón? Pensemos un poco en el prontuario que tiene todo tipo de selección chilena, que lamentablemente no nos deja bien parados en el extranjero, con sus frecuentes riñas y salidas de madre... ¿o no? entonces, ¿por qué ellos serán la excepción? Osea, personas de 18 y 20 años, que están ganando buen sueldo, compartiendo a diario con sus congéneres testiculares y con miles de "fans" histéricos por la fiebre roja... ¿se van a comportar maduramente?
abramos los ojos señores, este no es un acto xenofóbico en absoluto. Es una consecuencia de un coportamiento incorrecto, en un país donde la seguridad es SEGURIDAD, por lo tanto no se le acerca ni a los talones a Chilito.
Las vías diplomáticas están abiertas para estas tonteras, pero claro, cuando Zacarach fue capturado, la "presi" poco hizo para forzar la extradición, siendo que nunca más se supo con certeza qué suerte le corre al "sr. pederasta".
Reflexionemos un poco... a todos nos gusta criticar y reclamar, pero esto quizá es sólo un espejismo más, debido a que se dejaron llevar por los chiquillos "buenos" pa' la pelota, que no dejan de ser hombres revoltosos tanto fuera como dentro de la cancha.